domingo, 7 de octubre de 2018

Iguales ante qué

Los miembros femeninos y las miembras masculinas del caso real de la casa surrealista, disponen de todos los medios para dejarte bien claro que tu cuello pertenece a la suela de sus zapatos, cruz mediante.
Pero, a ti, que no se te ocurra decir que esos parásitos y esas parásitas no se ganan la vida honradamente.
Se puede opinar sobre tu sexualidad y tu conyugalidad, sobre cuál ha de ser tu redil y tu cuota para sus causas,... pero sólo a la sombra de la corona y la tiara... Y puntualizo, por si acaso: he dicho la tuya, no las suyas; que quede claro.
Y, para compensar, añadirán que todas somos iguales y todos tenemos soma.
Pero recordad:
Bienaventurados los lacayos que se sienten orgullosos de serlo por ser felices en el reino -ajeno, eso sí- de la ignorancia.
Bienaventurados los borbones porque de ellos es el reino que os subyuga y exprime a borbotones.

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